El gato de bengala, denominado también gato leopardo. Es un cruce originario de Estados Unidos entre gato común y gato leopardo asiático. Este cruce se realizó en los años 60 y el resultado fue un gato con gran personalidad y belleza salvaje.
Consulte con su veterinario Granada cualquier problema de salud que pueda tener su gato. En Clínica Veterinaria Alcazaba tiene a su disposición las herramientas diagnósticas más avanzadas para tratar a su mascota.
Entre las características del gato de bengala está:
-Es un gato de pelo corto, espeso y sedoso. Conserva su manto atigrado.
-El color de su pelo varía desde el marfil al naranja. Sus manchas que reciben el nombre de rosetas, poseen los colores entre canela y negro. Aunque el color básico de este gato es el color atigrado pardo con manchas.
-Su tamaño oscila entre 5-8 kg en machos y 3,5 kg en hembras.
-La cabeza es redondeada y ancha, y ligeramente más pequeña en proporción al cuerpo. Posee una mandíbula fuerte, nariz amplia y grande. Sus ojos son almendrados y de color amarillo verdoso, aunque existe una variedad en la que son azules. Los pómulos son altos y pronunciados. Sus orejas son redondeadas por las puntas y son medianas.
-El cuello que es grande en relación con la cabeza y es grueso y musculoso y largo respecto al cuerpo.
-Su cuerpo es robusto y musculado. Con largas y fuertes extremidades lo que le dan un aspecto esbelto y ágil. Sus patas traseras son algo más largas que las delanteras.
En cuanto a la media de vida de este felino oscila ente los 12-15 años de edad, como otros gatos domésticos. Siempre que su alimentación y cuidados sean los idóneos.
La alimentación del gato de bengala:
Esta mascota necesita una alimentación variada a base de piensos de alta calidad y agua. A estos gatos les gusta todo tipo de comida porque sus parientes eran carnívoros. Lo más normal es darles alimentos naturales, preferiblemente secos y adaptados a su edad.
Higiene de estos gatos:
-Cepillado del pelo, se realizará en dos partes, primero a contra pelo, y segundo en sentido del pelo. Bastará con cepillarlo un par de veces a la semana para mantenerlo limpio y brillante y que no se acumule.
-El baño. No será necesario bañarlo salvo que acumule mucha suciedad. Estos gatos acumulan más cerumen que un gato normal, por lo que ha de limpiarse más a menudo.
-Cortar las uñas. Es fundamental cortar las uñas para mantener su salud y evitar arañazos y accidentes.
-Revisión dental. Debemos de inculcarle desde pequeño al cepillado de dientes, evitaremos que se acumule el sarro y provoque mayores problemas bucodentales.
-Acudir al veterinario cuando sea necesario. No olvidarnos del calendario de vacunación, muy importante.
Curar heridas a un gato
Puede consultar el siguiente artículo si desea saber cómo curar una herida un gato y si tiene alguna duda más visite a su veterinario Granada en Clínica Veterinaria Alcazaba para más información.
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